El bobtail japonés es uno de los gatos que más expectación están causando en la actualidad. Y no es que hayan sido conocidos en el mundo occidental desde hace siglos, pero no han tardado en gustar a un gran porcentaje de los amantes de estos felinos.
Como te vamos a demostrar, el gato bobtail japonés no deja indiferente a nadie. Así que te aconsejamos que sigas leyendo y tomes nota de estas 10 características sorprendentes de este gato tan especial.
1. El viaje del Bobtail Japonés, De Japón al mundo
Aunque hoy en día, sea una raza extendida por todo el mundo, el bobtail gato es una especie autóctona de Asia. De hecho, comparte rasgos físicos con otras especies de gatos de estos orígenes. Pero, en este caso concreto, tenemos que buscar los primeros pasos en el Japón feudal.
No está claro si llegaron desde las islas Kuriles, pero se considera que ya hace un milenio que forman parte de la historia de Japón. En especial, de las zonas frías de sus archipiélagos norteños. No en vano, en 1602 se les concedió un especial estatus de libertad y protección, para que contribuyeran a acabar con las plagas de roedores que estaban amenazando a las industrias de la seda y del arroz. A los países occidentales no llegaron hasta 1968. Fue cuando Lynn Beck y Elizabeth Freret los introdujeron en Estados Unidos.
2. Una cola de lo más llamativo
El nombre de estos felinos ya te habrá dado algunas pistas sobre su rasgo físico más llamativo. Las denominaciones bobtail cat o japanese bobtail vienen a señalar los datos más significativos de esta especie: gato japonés de cola corta. Y es que, más allá de las comparaciones con la del conejo, esta cola destaca, además por su pequeño tamaño, por acabar en forma de pompón. Esta es más visible en los ejemplares de pelo largo, en los que puede ser levantada como si fuera una pluma.
En todo caso, esta cola enroscada, relacionada con la existencia de un gen recesivo, se ha convertido en toda una seña de identidad de estos gatitos. Ten en cuenta que resulta tan original que no habrá dos iguales. Cada cola, tiene su propia seña de identidad.
3. Un pelaje muy especial
Como te hemos avanzado, estos gatos pueden tener el pelo más largo o corto. Este pelaje fino y sedoso es uno de los atractivos de los bobtails. Los colores son muy variados, pero llaman mucho la atención los de manchas negras y rojas sobre blanco. Ten en cuenta que los japoneses consideran que dan suerte. Por otra parte, acuérdate de cepillar a los ejemplares de pelaje corto cada tres días. Los que lo tienen largo deberán ser cepillados a diario. De este modo, además, no correrán el peligro de tragarse las bolas de pelo que tanto daño hacen a sus estómagos.
4. Una agilidad que se percibe a primera vista
Nos referimos a que estos gatos tienen las patas traseras más grandes que las delanteras. Es esta cualidad la que les permite moverse con una gran agilidad y, sobre todo, saltar con mucha potencia. Tanto para jugar como para alcanzar algo que necesiten, podrán elevarse de forma extraordinaria gracias al impulso que les proporciona su tren inferior.
5. Un gato, generalmente, sano
Te confirmamos que sus cualidades físicas les permiten hacer mucho ejercicio; los bobtails son gatos muy sanos. No obstante, como todos los felinos, tienen predisposición genética hacia algunas afecciones en particular. En estos gatos, destacamos la relativa a las peligrosas bolas de pelo (tricobezoares) en el tracto intestinal. Asimismo, pueden padecer obesidad (si llevan una vida sedentaria) y enfermedades renales y urinarias. Llévalos cada seis meses al veterinario y tendrás su salud bien controlada. El bobtail es una raza que puede vivir entre doce y quince años, de media.
6. Una voz que enamora
Si alguna vez has oído maullar a alguno de ellos, te habrá sorprendido su voz dulce y melódica. Y es que se trata de una de las conocidas como voces cantarinas, dado que sobresale por su musicalidad. Se dice que incluso los bobtails pueden llegar a comunicarse con las personas, aprenden sus nombres y responden a ellos.
No te ha de extrañar, por ejemplo, que respondan a las llamadas de atención con maullidos, de forma habitual.
7. Su personalidad, único y muy juguetón
Como no son unos gatos perezosos, sino de los que gustan de moverse y ser curiosos, no te vas a aburrir con ellos. Su carácter no es nada apático y, si bien no son ellos quienes tomarán la iniciativa de mimarte, sí que van a disfrutar de que tú les ofrezcas tus mejores atenciones. Por eso, el bobtail japonés, se lleva bien con los gatos de su especie y están acostumbrados a vivir en grupos grandes de ellos y con personas. Por otra parte, se harán respetar ante los perros y otras especies gatunas.
8. Jugar es su pasión
Esta naturaleza afable hace que el bobtail, siempre tengan ganas de jugar. Gustan de tener sus juguetes propios e incluso son capaces de cogerlos por su cuenta para sugerir algún juego con los demás. Uno de los juegos habituales con estos gatos es el de retarles a agarrar juguetes colocados en altura. Con la ayuda de sus patas traseras podrán llegar a los lugares más insospechados, pero sé prudente.
9. Bobtails eternos
Acompáñanos ahora por este Paseo de la Fama de los bobtails. Anota estos tres nombres y que no se te olviden: Hello Kitty, Maneki-neko (el famoso gato de la pata pendular de los restaurantes chinos, aunque su origen sea japonés) y Meowth.
10. Bobtail Japonés, 100 % nipón
Aparte del origen que ya te hemos contado, te confirmamos que estás ante una raza majestuosa, así que hazle la reverencia. En los templos de Nikko y Gotokuji se les rendía culto y puedes ver diversas representaciones de estos gatitos. Para que seas consciente de su consideración divina, apunta esta curiosidad: llegó a ser paseado por el emperador en las audiencias oficiales.
En definitiva, un gato, el bobtail japonés, que recordarás por su cola, agilidad y carácter juguetón.