Podríamos decir que el gato Bengalí, es como un leopardo o un tigre en miniatura, con el espíritu salvaje de estos, pero con la calma, cercanía y cariño que puede darte un gato doméstico.
Pero conozcamos mejor al gato de Bengala, su carácter, origen, cualidades, tamaño, curiosidades e incluso criadero recomendado. ¿comenzamos?
El gato Bengalí, elegante y único
Son felinos híbridos, esto quiere decir que el gato bengalí es el resultado de cruzar un gato doméstico y un gato leopardo (felino de origen asiático) allá por el año 1963.
Tienen un cuerpo robusto y musculoso, piel suave y de dibujo atigrado con formas muy características.
Su carácter abierto y juguetón, con tendencia a investigarlo todo y una especial predilección por el agua, hacen de este gato, un animal muy especial.
Criadero gato Bengalí
Actualmente el gato Bengalí es de los gatos más deseados y que solamente se puede adquirir, mediante su compra, pero es muy importante que si tomas esa decisión, lo hagas siempre con responsabilidad.
Si das ese paso y quieres tener un gato de estas características, es muy importante que lo hagas en un criadero de gato bengalí oficial como Lepardland Bengal, con las máximas garantías de pureza y sanitarias.
Una selección mundial de las líneas de sangre más bellas, junto con un cuidado exquisito por la salud de cada gatito debería ser la prioridad a la hora de buscar el lugar donde adquirir tu gato bengalí.
Además, son muy importantes las condiciones de entrega del cachorro; Deben de tener un pasaporte internacional con todas las vacunaciones al día, analíticas de ADN ante enfermedades congénitas y víricas, microchip, estar registrados y reconocidos en la asociación felina y por supuesto, acompañados de su pedigree, que garantizará la pureza y que el gato es realmente lo que estás comprando.
Exige el contrato de compra con todos los datos del criador (núcleo zoológico, Registro en Club Felino, DNI…) junto con todas las condiciones y garantías del gatito y apóyate en el criador, para todas tus dudas
Medítalo, pues va a ser una responsabilidad que debes asumir sin contrapartidas.
Deberás cuidar de él y procurarle una vida junto a ti, de cariño, comprensión y atenciones. Esto no es negociable.
Precio del Gato Bengalí
Si a pesar de todas las posibilidades que tienes de adoptar un gato, quieres comprar un gato Bengalí, tienes que saber que su precio es elevado, si son de raza registrada y pueden incrementarse si además, su línea de descendencia, posée titulos o galardones.
Como hemos comentado anteriormente, nuestra recomendación es que lo hagas siempre en criaderos certificados y donde se les ha procurado todos los registros sanitarios y de raza, que son vitales por un lado para garantizar la línea de pedigrí, y sobretodo para garantizar, que la raza mantiene todos sus estándares.
El precio de un gato Bengalí de estas características, oscila entre los 1000 y 2500 euros. (1800 a 3000 dólares)
Dicho esto, vamos a hablar de las características del gato bengalí, de su personalidad, curiosidades, cuidados ¿empezamos?
El Manto atigrado del gato Bengalí
Su manto atigrado es único y muy llamativo en este gato. De pelo suave, delicado, espeso y muy corto.
Los colores van desde el ocre, naranja al crema, pasando por el amarillo y sus manchas, llamadas también “rosetas” de tonos pardos y oscuros. Tiene la punta del rabo negra y la tripita y almohadillas moteadas.
El origen de los gatos Bengalies
Se debe al cruce entre un gato leopardo nativo de Asia y un gato atigrado doméstico, obteniendo el lado salvaje y aventurero del primero, pero la tranquilidad y cercanía del segundo. La asociación internacional del gato lo reconoció como raza en el año 1991.
Un maullido muy personal
El gato de bengala tiene un maullido muy especial y diferente a cualquier otro gato doméstico, más corto y cerrado, incluso parecido a los grandes felinos. Es propenso a hacer ruidos extraños o raros y le gusta estar pendiente de cualquier sonido que el considere extraño.
Es normal también que quiera llamar tu atención, maullando con un sonido especial y personal, con el que seguro no podrán evitar hacerle cariños y arrumacos.
Personalidad fuerte y carácter aventurero
El gato bengalí es ante todo juguetón, de carácter fuerte que le llevará siempre a investigar y estar activo.
Le encanta comer, demanda acción y atención y se adapta muy bien a vivir en familia, aunque su lado salvaje le llevará a veces a cometer alguna travesura.
Necesita más espacio exterior que otros gatos domésticos. Se lleva bien con otros gatos y mascotas.
¿El agua? les encanta a los gatos de Bengala
A diferencia de muchos gatos, les gusta el agua y no es raro que viviendo en el exterior, si ven algún charco o zona húmeda, no duden en meterse. Exploraraán las zonas húmedas y no es raro que incluso se ponga a nadar.
Son buenos nadadores, sin duda una herencia de los gatos leopardo asiáticos, que son grandes pescadores.
Si tienes un gato bengalí, anímale a realizar alguna exploración con una bañera muy poco llena y agua tibia. Verás como incluso se pone a jugar y chapotea las patitas. Si es demasiado, un chorrito de agua de la bañera o el grifo, hará sus delicias.
Tamaño del gato Bengalí
Son gatos musculosos, de huesos fuertes y ágiles. Sus patas traseras están bien desarrolladas y les permiten dar grandes saltos.
No olvidemos que es un gato de gran tamaño por su constitución osea, de manera que no será raro que llegue a pesar entre 6 y 8 kilos de peso.
Cuidados del gato de Bengala
El Gato Bengala no requiere tantos cuidados como por ejemplo los gatos Persas u otras razas como los Sphynx.
Bastará con una buena alimentación, a poder ser rica en proteínas de calidad, un cepillado regular de su suave pelo y mucho, mucho cariño y atención, sobretodo para jugar con él, pues le encanta jugar.
El gato leopardo
La forma de la cabeza es redondeada y con forma afinada en la punta, de mandíbula fuerte y amplia. Sus orejitas son pequeñas, muy parecidas a las del leopardo asiático.
Los ojos del gato bengala son especialmente bonitos, de colo miel o almendra de todos amarillentos, tirando a verdes.
Así es el gato bengalí, un gato que guarda dentro la esencia de una genética salvaje, que demanda cariño y actividad, y perfecto si además puede disponer de una zona exterior donde poder correr, saltar y jugar como a él le gusta.
Un gato que además no requiere más cuidados que los propios de un gato de pelo corto, y que si se le procuras atención y una buena alimentación, puede llegar a vivir sano y fuerte muchos años.
Cuéntanos tu experiencia con el gato Bengalí si tienes la suerte de compartir tu vida con este precioso felino.