Cuando en 1854 el escritor Joseph Train, viajó a la isla de Man, descubrió unos gatos muy particulares, el gato Manx .
Los describió como criaturas peculiares, y aseguró, podían ser una extraña mezcla entre un conejo y un gato. ¿Por qué captaron la atención de los viajantes, en aquella remota isla?
Te lo contamos en este artículo y de paso conocerás a un gato muy especial y diferente.
Origen del gato Manx
Cuando un gato nace sin cola, por una capricho genético (y esto ocurre), esta característica, no continua y desaparece, en las generaciones posteriores, sobretodo en gatos asilvestrados y amplios entornos abiertos.
Pero en la isla de Man, ocurrió que en la pequeña población de gatos aislados, este hecho, fue trascendental, para que esta mutación dominante, persistiera y definiera, esta característica particular, en las futuras generaciones de gatitos.
La clave es que era una isla y los cruces persistieron, entre aquellos gatos que no tenían cola, al estar en un mismo territorio.
El Manx se vuelve famoso
El gato Manx, fue presentado en sociedad por primera vez en el año 1860, en los primeros concursos felinos y tuvo gran éxito, por su inusual característica y por un carácter muy especial.
En el siglo posterior, se dio a conocer en todo el mundo.
La CFA valoró la raza de gato Manx, pero solo los de colores de occidente tradicionales en la época, fueron registrados.
Características de los gatos Manx
Se pueden distiguir las siguientes variaciones:
● Gato manx longies; También el de pelo largo, no fue reconocido, porque tiene la cola, por lo general, normal, pero algo curvada.
- Gato manx Stumpies: Estos gatos tienen la cola más ancha y corta.
- Gato manx Risers: presentan un resto de cola o cartílago, en su caso.
- Gato manx Rumpies: Estos no tiene prácticamente cola y presentan un hueco.
Generalmente, todos los gatos Manx, que son presentados a los certámenes felinos y que son reconocidos, son los Manx rumpies, pero hay que decir, que su cría, se emparejan con las demás variantes, evitando así afecciones que pueden ser mortales.
El Manx y el faso mito
Existió un mito sobre el gato manx, que llegó a hacerse famoso y en el cual se creía que era el cruce entre un gato y un conejo ( al que llamaron «cabbit»).
Esto se debía a que las patas de atrás, son muy largas y algunos presentan una cola «pompón» recordando levemente a los conejos.
¿Sin cola? no pasa nada
Precisamente la cola, cumple una función muy específica en los gatos y no es otra que el equilibrio.
Con ella compensan los movimientos coordinados y les ayuda a mantener la estabilidad, así como trepar.
bEn el caso de los gatos manx, evolucionaron desarrollando unas pata traseras más largas de lo habitual que otros gatos. El Bobtail japonés, comparte igualmente esta característica.
Curiosidades de la raza de gatos Manx
Como curiosidad, decir que si tocas la cola de un gato Manx, no notarás ningún hueso o cartílago.
Tiene unas orejas rectas y hacia afuera. Sus patas delanteras son más cortas, pero fuertes y un cuerpo sólido y compacto.
El gato manx tiene un carácter tranquilo y hogareño. Son sociables y buscan la compañía y tranquilidad del hogar.
Se dice que son capaces de grandes saltos, más que otras razas de gatos y que les encanta dormir cerca de las ventanas o directamente en el suelo.
El gato Manx es un gato desconocido y no por ello, hablar de ellos y conocerlos, pues ser interesante.
A veces, un cambio genético natural en un entorno determinado, puede dar paso a un gato con características diferentes al resto.
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