Conocido también como perro Akita japonés, el Akita Inu es una de las razas más conocidas y populares en Japón, la misma, incluso tiene una película, la cual relata la historia de un perro fiel perteneciente a esta raza.
Venerados como un símbolo de buena fortuna, estos perros se han robado el corazón de miles de personas. Vamos a aprender más de estos canes, su origen, características, cuidados, carácter y mucho más.
Origen del Akita Inu
Esta raza de perro japonesa, proviene de la región de Akita, la cual le da su nombre. Los antecesores de esta raza, eran perros de tamaño pequeño que realizaban el trabajo de cazadores de osos y eran conocidos bajo el nombre de Akita matagi.
Durante el año 1603, estos comenzaron a ser usados para las peleas de perros; con el fin de que la raza aumentara su fuerza y resistencia, fueron mezclados con tosas y con mastines.
Como resultado a estos cruces, nacieron perros más grandes pero sin las características comunes de los Spitz.
En el año 1908 las peleas de perros fueron prohibidas en la tierra del sol naciente, sin embargo, la raza mantuvo su nuevo tamaño y no regresó al anterior. Tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial, la raza Akita japonés se vio mermada de manera drástica.
Para ese entonces existían tres tipos diferentes de esta raza:
- Akita matagi: muy parecido al original.
- Akita de pelea: mixto con el perro tosa.
- Akita ovejero: efecto del cruce con el ovejero alemán.
Aquellas cruzas que tenían características del mastín y del ovejero alemán captaron la atención de los criadores provenientes de Norteamérica. Por ello, fueron tomados para crear una población de esta raza en los Estados Unidos.
Akita inu americano
Estas líneas creadas, especialmente la llamada “Dewa”, fueron las que le dieron origen a la raza reconocida actualmente como Akita Americano (foto inferior).
Los criadores y amantes de la raza japonesa, no aceptaron estas líneas americanas como representantes de la raza nipona. Debido a esto, tomaron la decisión de comenzar con el repoblamiento del Akita matagi.
Como resultado de esta repoblación tenemos al Akita Inu que conocemos actualmente. Este es un poco más grande que el Akita matagi original, sin embargo, mantiene similitud con el tipo Spitz y no posee las características del mastín ni del ovejero alemán.
Características del Akita Inu
El Akita Inu es considerado un perro grande. Su cabeza es ancha y con abundante pelaje, pero su tamaño es ajustado a las dimensiones de su cuerpo, el cual es musculoso y lleno de fuerza.
El hocico de esta raza, como era de esperarse, también es fuerte y moderadamente alargado, aunque su base es ancha, se va haciendo estrecho hacia el extremo, no obstante, no llega a ser puntiagudo.
La mordida de estos perros es poderosa, pues posee unos dientes firmes y que cierran en forma de tijera.
La nariz es de color negro, aunque en ocasiones son más claras, en especial cuando el perro es de color blanco. Los labios de la raza deben estar perfectamente adheridos.
Las orejas y los ojos de estos perros tienen forma triangular. En el caso de los ojos, estos tienden a ser de un color marrón oscuro, pequeños y por lo regular, están un poco separado entre ellos.
Las orejas, en cambio, son un poco pequeñas, con un grosor notable y se encuentran orientadas hacia adelante.
Cuando se habla del cuello del Akita Inu, podemos notar que es grueso, lleno de músculos y que carece de la papada que poseen otros perros japoneses y del cual proviene esta raza.
El pecho de estos perros presenta gran profundidad y la cola se encuentra enroscada sobre su espalda. El manto exterior de este perro es liso y duro, mientras que, el interno es suave y denso.
El pelaje que se observa en la cola de estos perros es un poco más largo que el del resto del cuerpo. Los colores que se aceptan de esta raza Akita son dorado, blanco, sésamo y atigrado.
Esto perros tienen una altura aproximada de entre 61 y 67 centímetros. En el caso de su peso, oscila alrededor de los 45 kilogramos.
Cuidados del Akita Japonés
Estos perros pueden adaptarse sin problemas a las inclemencias del tiempo. Debido a la espesura y densidad de su pelaje, lo ideal es que este se cepille diariamente, en especial en las temporadas de muda de pelo, pues así evitas que se enrede y presente nudos.
Se debe tomar en cuenta la alimentación del Akita Inu, pues una alimentación deficiente afectará de forma directa en el manto del perro. En estos casos, perderá el brillo y se verá poco saludable.
El Akita Inu requiere de ejercitación entre media y alta por día, esto dependerá de la energía del ejemplar y su estado anímico del día.
Se recomiendan dos paseos diarios, además sería bueno que el perro pudiera correr o realizar actividades físicas que requieran de un desgaste adecuado de energía.
Esta raza canina es capaz de adaptarse fácilmente a la vida tanto en una casa como en apartamento. De igual manera va a necesitar sus paseos diarios y actividades físicas, por lo que el tipo de vivienda no le afecta.
Estos son perros muy inteligentes, por lo que será necesario que su dueño sea una persona con personalidad fuerte y asertiva. Esto se debe a que, si el Akita no siente que la actitud de su dueño sea la adecuada, el tomará las rienda y comenzará con la imposición de sus propias normativas. Esto no será sencillo de corregir.
Esta raza solo sigue a quien considera su líder, por ello, nunca puedes acceder a sus exigencias y demandas. Dentro de Japón, es considerado un honor, un privilegio y una muestra de nobleza el poder criar y educar a un perro de esta raza.
Varios de los expertos que estudian esta raza aconsejan a los dueños estimular la mente de estos caninos por medio de la enseñanza de trucos y habilidades, la obediencia y la identificación de objetos. Además, es recomendable ejercitarlos con actividades físicas, estas pueden ser de agilidad, senderismo, entre otras.
Todas las actividades que le son enseñadas a los Akita Inu, deberán realizarse por un máximo de 1 hora por día, esto se debe a que, si se exagera con el tiempo, el perro comenzará a tomarle mala idea a las mismas, tras dedicarle demasiado tiempo.
Es bien conocido que esta raza de perros suele ser un poco exigente con los alimentos que ingieren.
Por ello, en ocasiones, puede costar un poco encontrar el alimento adecuado, pues este no solo debe ser saludable, sino que también debe ser del agrado del perro.
Se debe evitar en lo posible los cambios bruscos de alimentos. Lo recomendable es que se le dé un poco de tiempo al animal para que se acostumbre lentamente al sabor de la comida que se le ofrece, de esta forma, el estómago del perro podrá digerir poco a poco estos nuevos alimentos.
Si se realizan cambios frecuentes en la alimentación, se puede afectar el sistema digestivo de la mascota y provocar que el perro presente un cuadro diarreico o congestión. El can deberá acostumbrarse de forma lenta a la nueva comida que se le dé, este proceso puede tardar hasta una semana.
Para esta raza, la comida ideal debe ser aquella que contenga una gran cantidad de carne (70% aproximadamente de la cantidad total de alimentos), el 20 o 30% restante deberá estar basado en verduras.
No es necesario darle cereales de forma abundante, se le puede dar en pequeñas cantidades. Debido a que el Akita Inu tiende a padecer de problemas en la piel, lo ideal es que se evite la ingesta de carne cerdo y el pienso basado en una gran cantidad de soja.
Además de ello, es importante que sepas controlar la cantidad de golosinas que le das entre horas. La comida se le puede dividir en dos raciones por día. La carne más recomendada para esta raza es la de vacuno, cordero y la de avestruz.
La diversidad de la alimentación del Akita Inu va a depender de los gustos del perro y la disposición y decisión de su dueño, por lo que puedes tomarte la libertad de intentar alimentarlo de la manera que consideres más correcta.
Estos perros aceptan muy bien la dieta BARF, es decir, aquella que se les da de manera cruda y está biológicamente aprobada, por lo que puede ser una buena opción para tu mascota. La misma puede que sea aceptada con mayor rapidez por el perro. Claro, esto dependerá también de los gustos del animal.
Carácter del Akita Inu
El carácter de estos perros se considera reservado y hasta tímido, por lo general, son mayormente tranquilos, de hecho, incluso bajo situaciones de estrés, tienden a mantener la calma, lo que muchos japoneses definen como una personalidad admirable.
Son perros notablemente serenos, equilibrados y dóciles. Además extremadamente leales, en especial con quien consideran como su líder y amigo, siendo esta la característica más reconocida de la raza y la más admirada por japoneses y extranjeros.
Suele ser bastante desconfiado con las personas extrañas, sin embargo, son animales que jamás van a atacar a otros sin un motivo, esto puede ocurrir cuando se les provoca o se les agrede, lo que causaría que el perro se sienta amenazado, vulnerable y en peligro. Debido a esto, es considerado como uno de los mejores perros guardianes.
No son perros que puedan tener todas las familias ni mucho menos los novatos, pues requiere de personas que tenga experiencia en el manejo de estos animales, que sepan cómo imponer liderazgo y qué hacer a la hora de los entrenamientos y la educación de la raza.
Son perros de carácter fuerte, por lo que si nota que una persona es débil en este aspecto, no dudará en tomar una jerarquía superior.
Sociabilidad
La interacción del Akita Inu con otros perros es un poco compleja, pues este perro tiende a ser un poco dominante, aunque no será el que intente crear enfrentamientos con los demás, es el típico perro que crea enemistades si se le enfrenta de forma directa.
Por este motivo, es de suma importancia que a estos perros se les enseñe y acostumbre a socializar con otros desde cachorros, sin discriminar razas, tamaños e incluso, también deben exponerse a otros humanos y animales domésticos.
Los niños son bien aceptados por el Akita Inu, especialmente los pertenecientes a la familia, pues este perro se convertirá en su guardián y no lo pensará dos veces para protegerlos de aquello que los amenace o ponga en peligro. Debido a su personalidad, tiende a ser muy paciente y suave con ellos.
Existe cierta controversia respecto a este tema, pues muchos dicen que esta raza no es adecuada para tenerla en hogares con niños. Sin embargo, si se le cría de manera correcta, los Akita Japoneses serán perfectos compañeros de juego de los niños. Todo dependerá de la experiencia y eficiencia de su líder.
Enfermedades y Salud
Esta es una raza generalmente sana, con los cuidados adecuados, podrá vivir una vida saludable y libre de enfermedades que pongan en riesgo su vida. Sin embargo, pueden presentar algunas complicaciones comunes, estas son:
- Displasia de cadera
- Patologías del sistema inmunológico
- Patologías de las rodillas
- Disfunción de las glándulas tiroideas
Así como cualquier otra raza o especie, es de suma importancia que estos animales hagan visitas periódicas con su veterinario. Se pueden realizar una vez cada seis meses o de manera anual, dependiendo de las indicaciones del profesional médico.
Llevar un control adecuado de las vacunas y desparasitaciones será de suma importancia para la salud integral del animal, pues con ellos se pueden evitar muchas patologías que son causadas por el la falta o descontrol de las mismas.
10 curiosidades del perro Akita Inu
A continuación mencionamos algunos datos curiosos que seguramente no conocías de esta raza de perros, seguro te sorpenderas.
- La lealtad de esta raza japonesa, así como la propia raza, ganó popularidad gracias a la película titulada “Siempre a tu lado, Hachiko” la cual fue creada en el año 2009.
Esta, es un remake de la película original japonesa en la cual se relata la historia de un perro Akita Inu, de nombre Hachiko, que iba todos los días a recoger a su dueño en la estación luego de que este saliera de su trabajo.
Su dueño fallece, y tras este incidente, Hachiko sigue yendo de manera diaria a la estación en busca de su dueño, esto lo hizo durante 10 años seguidos.
Con el paso del tiempo, y mientras el perro esperaba a su dueño muerto, las personas comenzaron a darle de comer al can. Hachiko terminó siendo conocido por casi todo el país, así como su historia.
Tanto fue el cariño y respeto que se ganó, que las autoridades decidieron crear una estatua en su honor en el lugar donde él esperaba diariamente.
- En Japón se considera patrimonio nacional natural.
- Se debe tener cierto conocimiento en la crianza del Akita Inu o razas similares, pues estos perros deben ser liderados por una persona de carácter fuerte que sepa tomar las riendas.
- El Akita Inu tiende a observar al miembro más débil de su manada y tras detectarlo, intentará dominarlo y colocarse jerárquicamente sobre este.
- Son perros fieles, que protegerán a los suyos aunque tenga que convertirse en un perro agresivo, por lo que es indispensable saber cómo controlarlo antes de que esto llegue a ocurrir.
- Son perros relativamente sanos, sin embargo se debe tener cuidado con su alimentación ya que tienden a tener pequeños problemas con su piel si esta no es la adecuada.
- Existe una controversia entre si la raza es adecuada para familias con niños o si por el contrario es inadecuada. Al final, la decisión lo define la crianza, educación y adiestramiento que se le dé al animal.
- Son perros muy selectivos con su alimentación, incluso algunas personas los describen como mañosos.
- Aunque su apariencia tierna no lo dé a entender, estos son perros con una fuerza increíble, pues su cuerpo está constituido por una fuerte musculatura.
- Otro dato curioso de esta raza es que se considera joven después del año, adulto luego de los 2 años y anciano luego de los 7 años. Tiene un promedio de vida de 10 a 15 años. Los machos de esta raza se consideran totalmente desarrollados cuando cumplen los 4 años de vida, mientras que las hembras a los 2 años.
Ahora que conoces todo sobre el Akita Japonés, puedes compartir este artículo para que más personas vean a este fiel y amoroso pero que se ha ganado el respeto y la admiración de toda una nación.
Además, puedes decirnos en los comentarios si ya conocías la historia de Hachiko, el Akita Inu más famoso de Japón y el mundo y so tienes la suerte de compartir tu vida con un ejemplar de esta raza.