Es posible que paseando por la calle, en el parque, en tu ciudad te hayas cruzado con él.
El perro Pinscher miniatura (también llamado Pincher mini, comúnmente) es inconfundible, porque es como una en versión «mini de la propia raza Pinscher de la que procede».
Pura energía, alegre, activo y muy juguetón, esconde un origen y características muy curiosas, que te van a sorprender y que vamos a detallar aquí, para que lo conozcas mejor. Empezamos.
Un Pinscher en miniatura
El Pincher mini tiene su origen en Alemania y proviene de la familia de los pinscher, también son llamados zwergpinscher. Hay quien lo asemeja a un Doberman en miniatura, aunque nada tenga que ver con esa raza.
Su origen se debió a que su tamaño y agilidad, lo hacía ideal para la caza de presas pequeñas. Mediante la selección en la cría, de su «hermano» el Pinscher, ha evolucionado como una raza propia.
El «perro cuadrado»
Y es que físicamente el Zwergpinscher, tiene constitución cuadrada, es decir, que mide casi lo mismo de largo que de alto (30 x 40 cm aproximadamente).
Tiene una fisonomía musculosa y porte elegante. Cabeza larga y fuerte y orejas rectas y grandes, en proporción a su cuerpo.
Como curiosidad, en la cría de esta raza, uno de los objetivos, era conseguir una cola en forma de curvada. Su peso se sitúa entre los 4 y 7 kilos.
El pelo «corzo» del «Mini Pincher»
El Pinscher mini, suele ser unicolor o alternancia de color negro con un color marrón o rojizo, por eso a veces se le llama «corzo», porque recuerda al pelaje del ciervo.
Puede haber cierta variación en el tono y está presente en zonas concretas como en el pecho (en forma de triángulo) parte inferior de la cabeza y cuello, sobre los ojos (parecen dos cejas) y en la parte interna de patas.
El pelo es corto, grueso y brillante, sobre una piel firme y fuerte.
El Pinscher es un deportista nato
No te dejes engañar por su pequeño tamaño y su tierna mirada, pues el Pinscher es pura dinamita. Energía en estado puro.
Gracias a su porte de atleta y su buena forma física, le encanta correr , jugar, pasear, saltar y es un perro que se adapta muy bien a los deportes al aire libre con sus humanos.
Para esta raza, es muy importante cubrir estas necesidades. Requiere espacio y actividad constante.
No les gusta estar solos
Si hay algo que no le gusta al «Pincher mini» es quedarse solos en casa. ¿por qué? pues porque es uno de los perros que más apego tiene a sus humanos y los sigue allí a donde estos estén.
En esta raza se ha comprobado que puede establecer fuertes vínculos con una persona más que con el grupo familiar. Esa persona habitualmente es mujer.
Inteligencia, protección y nervios del Pinscher Mini
No hay que olvidar que es considerado un perro muy activo y que en su origen, tenía como función la protección de las casas, frente a plagas o visitas inesperadas.
Bajo esa apariencia juguetona y alegre, hay un pequeño «ladrador en potencia». Una correcta educación, sobretodo en los primeros meses de vida, evitará manías y miedos, y conseguirá que sea un perro equilibrado y más tranquilo.
Antes hemos dicho que le encanta el ejercicio físico, pero también tenemos que fomentar su actividad mental. Y ojo, estamos ante un perro muy inteligente, con una gran capacidad cognitiva, buena memoria y capaz de resolver ejercicios mentales, con gran habilidad.
Potenciar este aspecto, es fundamental para disfrutar plenamente de su personalidad.
Su origen como «perro ratonero»
El Pinscher tiene un origen en los primeros perros de caza y vigilia, hace miles de años, remontándonos a la misma edad de piedra, donde era normal su presencia en los asentamientos humanos.
Es posible que por su tamaño y habilidad, fuera un perro único en la eliminación de pequeños mamíferos, que suponían un peligro para los granos recolectados.
En el siglo pasado, ya estaba presentes en muchas explotaciones agrícolas, no en vano, se le denominada perro ratonero. El terror de ratones, ratas y otros roedores.
Aparece la raza «Pinscher en miniatura»
La crianza de la versión miniatura del Pinscher, empieza a principios de siglo XX, con la ayuda de Josef Berta, que daría con una raza propia, variante del Pinscher y más pequeña.
Gracias a grupos de criadores posteriores, pudo mantenerse en el tiempo. Al poco de conocerse, el Pinscher en miniatura, se hizo muy popular como perro doméstico, especialmente en la alta burguesía, que lo vieron como un perro elegante, cariñoso y protector.
Se convirtió en el perro preferido de las mujeres de la alta sociedad. Desde entonces, el «Pincher mini» es una raza muy conocida y extendida en todo el mundo y el club Pinscher Schanauzer, lleva desde 1895 preservando la crianza bajo un estándar de responsabilidad y salud de esta raza.
¿Es un perro friolero?
El «Mini Pincher» tiene una salud de hierro, y no padece las enfermedades propias de otras razas pequeñas, tan habituales, como ocurre en el Pomerania o el Teckel.
Pero tiene un punto débil y es que en invierno, puede pasar especial frío, en sus orejas y cuerpo por la fina capa de piel, por lo que puede ser una buena idea, ponerle un abrigo en los meses más duros del invierno, cuando vamos a pasearlo a la calle.
Cría responsable del «Mini Pincher»
La cría de esta raza, es poco habitual, por eso en el caso que busquemos un criador, nos tenemos que asegurar de que cumple el estándar de la raza de la federación cinecológica internacional, algo muy importante para preservar el afijo.
El criador debe facilitar toda la información relativa al cachorro y asegurar unas buenas condiciones de salud y cría responsable, con documentación que así lo acredite. También debe ser apoyo y ayuda, para cualquier consulta o duda que tengamos.
A tener en cuenta antes de tener un Pinscher Miniatura
Sobre todo lo que hemos hablado de este perro, hay algo que nos gustaría subrayar y es que la persona que decida tener este perro, tiene que estar 100% segura de darle y procurar, todo lo que esta raza requiere.
El que sea un perro pequeño, no quiere decir que necesitará menos ejercicio y atenciones que un perro mediano o grande.
El mini Pincher requiere, para una correcta educación y para que sea un perro más sociable y equilibrado, ejercicio y actividad diaria, que estimulen su mente y su cuerpo.
También un correcto adiestramiento en ocasiones, ya que debemos entender y saber focalizar, su ímpetu y fuerte personalidad, para disfrutar de un perro único.